La fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual del 1° Turno de Córdoba, Alicia Chirino, dictó la prisión preventiva del médico inhabilitado Spiro Antonio Dellisanti (58) por presunto abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de una adolescente de 17 años en el dispensario municipal de Río Primero.
Dellisanti había sido condenado anteriormente por efectuar al menos cuatro legrados ilegales en una clínica clandestina, además de otras penas como falsificar la identidad de una bebé y balear a un policía durante un allanamiento. A pesar de haber cumplido con las sanciones de prisión por esas condenas en diciembre pasado, Dellisanti estaba ejerciendo ilegalmente la medicina en Río Primero porque le quedaba pendiente una inhabilitación profesional de 14 años y medio.
La denuncia formulada por la madre de la adolescente destapó la situación de ejercicio de la medicina a pesar de la inhabilitación impuesta por la Justicia y el consiguiente quebrantamiento de la pena. La joven cumplió los 18 años un mes después de la denuncia y es representada por el querellante Carlos Nayi.
El relato de los hechos que ahora cuentan con la fundamentación de la fiscal Chirino, indican que la víctima concurrió la mañana del 10 de agosto pasado al dispensario, con dolores abdominales y náuseas. En ese momento, Dellisanti cerró con pasador la puerta del consultorio, le pidió que se desnudara y se acostara en una camilla y durante tres o cuatro minutos le hizo tacto vaginal argumentando que estaba embarazada, lo cual no era cierto.
Disconforme con la atención la adolescente concurrió a otro dispensario, en Villa del Rosario, donde relató lo sucedido y le advirtieron que podría haber sido víctima de un abuso. En declaraciones efectuadas por esos días a El Doce, el acusado intentó justificarse y reconoció que había introducido sus dedos en el cuerpo de la menor, lo que sirvió a los querellantes para fundamentar la denuncia.
La fiscal Chirino justificó la prisión preventiva basándose en sus antecedentes y en la peligrosidad procesal que representa el imputado. La pena de prisión prevista para el supuesto que se le reprocha oscila entre los 6 y los 15 años de prisión, informó el medio La Voz.
En su momento, Nayi expresó que Dellisanti ”es una persona que ha demostrado proclividad para apartarse del camino de la ley y de las condenas impuestas por un tribunal competente”. Ahora, la fiscal le dictó la prisión preventiva y avanza en la investigación.
Quebrantamiento de pena
La situación denunciada sirvió para poner al descubierto que Dellisanti seguía ejerciendo la profesión a pesar de que lo tenía prohibido por la última condena. La situación destapó que las instituciones que debieron velar para que él no pudiera ejercer no habían actuado a la altura de las circunstancias.
Por un lado, la Justicia federal habría omitido al Consejo de Médicos notificarles de la inhabilitación, mientras que desde el municipio no advirtieron que habían contratado a un profesional que registraba numerosas condenas y era conocido por sus antecedentes.
Una vez que estalló este escándalo, los mecanismos se aceitaron y, notificado, el Consejo de Médicos suspendió a Dellisanti hasta el 10 de setiembre de 2031.
Por otra parte, la semana anterior el fiscal federal Carlos María Casas Noblega presentó ante el juez Miguel Hugo Vaca Narvaja el requerimiento de instrucción del médico detenido por “quebrantamiento de pena”. En los próximos días se conocerá la fecha en que el magistrado indagará a Dellisanti por estos hechos.
Fuente: Hablando Claro