El evento que fue un éxito, donde unas 800 personas estuvieron presentes, para ver a las 17 participantes, entre las cuales, la dupla conformada por las morterenses María Pineda y su hija Daiana Mendoza con un puntaje de 75,85 obtuvieron el primer puesto de esta nueva edición de la competencia, a ellas la siguieron Victoria Trossero y Virginia Picco de Marull (74,42) y Andrea Heredia y Martina Pérez de Balnearia (69,14).
Este año el formato del certamen fue diferente, en ediciones anteriores las concursantes debían cocinar un costillar de 15 o 16 kg, ahora debían realizar un asado, similar a los que uno cocina en su casa, con una presentación, guarnición y un corte sorpresa que fue una dificultad que le puso el jurado, a las duplas participantes que representaron a Monte Cristo, Toro Pujio, Marull, Balnearia, Morteros, Brinkmann, Porteña y La Paquita, entre otros Este año el formato del certamen fue diferente.
Las ganadoras se llevaron obsequios y un premio en efectivo de 20 mil pesos, “fue como festejar la vida” expreso María Pineda, conocida chef de Morteros, que ya había logrado dos segundos puesto y un tercero en el certamen de cocineras.
Solo que esta vez su compañera en la cocina fue una de sus hijas, “teníamos que cocinar cuatro cortes (morcilla, salamín, costilla y vacío) más uno sorpresa”, destacó Pineda explicando que “el corte sorpresa fue una colita de cuadril bastante grande y gruesa”.
El intendente de Marull, Gabriel Faletto se mostró satisfecho por haber cumplido su promesa de dar continuidad a este evento que consideró “distintivo” de la localidad y que “debe quedar en el calendario”.
Según contó Pineda su equipo arrancó a las 10.05 hs. y a las 12.20 hs. entregaron todo junto a unas ricas empanadas, “Hicimos salsa criolla y una salsa agridulce, además cocinamos empanadas criollas dulces y salteñas”, señaló emocionada la morterense que fue reconocida especialmente junto a su hija por la decoración de su stand.
“Los jurados destacaron la decoración de la mesa y nos felicitaron”, dijo.Con una vasta experiencia en la cocina, Pineda reconoció que “fuimos con una meta, el punto de la carne cocinada pero jugosa y así salió, tal cual lo habíamos hablado”.
La felicidad es inmensa para la familia y así lo reconoce María: “estar con mi hija Dai significó mucho para mí y la sentí segura durante todo el certamen. Es algo que tenía pendiente durante toda la pandemia, fue como festejar la vida después de tantas pálidas que nos tocó pasar”, expresó feliz María.
Fuente: El Tiempo de Morteros