EN FRONTERA POLICIAS PRIVARON DE LA LIBERTAD A PERIODISTA
La Policía de Frontera (Santa Fe) impidió que el cronista, Franco Cervera de Radio Estación 102.5 realizará la cobertura de disturbios que se estaban produciendo en la comisaría de Barrio Puzzi entre efectivos de la fuerza y algunos vecinos.
Mientras el periodista estaba registrando en su teléfono celular su tarea de prensa, una uniformada lo increpó sin motivos, a los empujones e insultos, tres policías metieron a Cervera dentro de la comisaría y lo despojaron de sus elementos de trabajo personales.
En el exterior de la sede policial se producían corridas, los vecinos, hombres y mujeres gritaban y encendían fuego. El conductor de este medio fue privado de su libertad por al menos 40 minutos, mientras recibía agresiones verbales de una integrante de la fuerza que sería de apellido Asís.
A pesar de haberse identificado desde el primer momento, este trabajador de la prensa recibió maltratos hasta que finalmente intervino el subjefe de la sede Frontera y lo liberaron.
Desde el medio ya se dispuso a un abogado para presentar la denuncia y comunicar lo ocurrido a la Fiscalía de turno como también al Ministerio de Justicia de Santa Fe.
En este contexto, Franco Cervera relató lo que padeció en la tarde noche de este lunes y comentó: “Este lunes a las 19.45 llegué a la esquina de Calle 1 esquina Calle 84, para roportar los incidentes que se estaba dando al frente de la comisaría de Frontera. En momentos en que estaba filmando los hechos, se acercó una policía que empezó a insultarme y le expliqué en reiteradas oportunidades que soy periodista y estaba trabajando. Pero tanto a esta mujer como a sus compañeros no les importó y me detuvieron y me metieron a la comisaría”.
“La mujer policía estaba muy alterada. Me insultaba, me amenazaba con guardarme por un tiempo y con secuestrarme la moto”, agregó.
“Por suerte no me puse nervioso y no le contesté nada fuera de lugar porque la mujer estaba muy nerviosa y no paraba insultarme. Incluso denigrarme por ser periodista”, expresó.
“Dentro de la comisaría me sacaron las pertenencias, me hicieron sacar la campera, las zapatillas, me pusieron contra la pared con las manos arriba para requisarme, mientras continuaban los insultos por parte de la mujer policía”, contó Cervera.
“Después de algunos minutos, cerca de 40 minutos, el subjefe de la fuerza, intercedió y tras pedir disculpas por el mal momento me dejó retirarme de la comisaría”, finalizó.
Fuente: Radio Estación