El Gobierno Municipal de la ciudad de Arroyito informó que el Intendente, junto con el Intendente de San Francisco, y miembros de la Comunidad Regional, aprobaron por unanimidad el convenio para la construcción de una estación transformadora en el sector sur de la ciudad para dar respuesta a la demanda que solicita el nuevo edificio de la Escuela PRoA.
Esta infraestructura era uno de los temas a resolver respecto al avance de la obra, ya que proporcionará la capacidad necesaria para abastecer de energía a la escuela PRoA de la ciudad. Esta gestión que solicitó el Intendente a la Comunidad Regional garantiza el suministro adecuado y continuo para sus actividades educativas.
Es importante destacar que, en el futuro, esta estación también servirá para abastecer al barrio, beneficiando además a la Escuela 329, ubicada en la misma zona.
Además, días pasado el Intendente junto al Gerente del Complejo Arcor Arroyito, recorrió el edificio donde pudieron observar un gran avance de obra, los objetivos que se plantearon junto a la empresa y la Comunidad Regional se están cumpliendo.
Hace una semana, los alumnos y alumnas de este establecimiento educativo salieron a la calle marchando desde el salón improvisado como escuela donde estudian hasta la Municipalidad para que los ayude en su reclamo de tener de una buena vez el edificio propio, el cual se construye desde hace unos cinco años pero todavía no está terminado.
Los chicos decidieron movilizarse porque advierten que los trabajos fueron avanzando lentamente y ya el final del año está encima.
El colegio está en construcción desde hace un tiempo y tendría un avance del 70%. Actualmente cursan en un salón adaptado para clases, aunque no cumple con todos los requisitos. Qué dice el Ministerio de Educación
Manifestamos por el derecho a la educación digna, por eso queremos pedir por nuestro edificio para estudiar”, dice una estudiante del quinto año de la escuela Proa de la ciudad de Arroyito.
“No hay condiciones adecuadas y nos merecemos mejores cosas, por eso pedimos por el edificio propio que nos prometieron cuando íbamos a segundo año”, destaca un compañero.
Guillermo Demichelis, padre de un estudiante que egresa este 2023 e integrante de la cooperadora escolar, contó, lo estudiantes toman sus clases en un salón (de fiestas) adaptado, aunque no cumple con las condiciones para funcionar como escuela.
“Es un salón grande dividido por durlok en condiciones que no son aptas para una escuela”, explicó y agregó: “Los chicos llevan cinco años de promesas incumplidas”.
Demichelis sostuvo que debido a las altas temperaturas hubo casos donde los estudiantes se descompusieron a causa de la falta de circulación de aire en las instalaciones: “Las aulas no tienen ventanas, no hay mucha circulación de aire. Si prenden el aire acondicionado salta la instalación eléctrica porque no es la adecuada”, remarcó.
Asimismo, la comunidad educativa de este colegio confía en la próxima gestión de gobierno provincial que desde diciembre estará en manos de Martín Llaryora.
Desde el Gobierno municipal a cargo del intendente Gustavo Benedetti, recordaron que la obra de dicho edificio es responsabilidad provincial.
“No excusamos a nuestra responsabilidad, pero esto es una clara consecuencia de haber traído una ‘Escuela sin Escuela’ (en referencia a la gestión anterior). Estamos a favor de luchar por más y mejor educación pero el municipio no tiene facultad de finalizar una obra de la que no maneja ni su presupuesto, ni su ejecución”, agregaron.
